¿En qué casos se considera el estrés como accidente laboral?

Existen enfermedades que no están recogidas en la lista de Enfermedades Profesionales, pero que en muchos casos aparecen y están directamente relacionadas con el desempeño del trabajo, como es el caso del estrés.

A partir del 1 de enero de 2022, el bornout, o síndrome de agotamiento profesional ocasionado por el estrés crónico en el trabajo, queda oficialmente incorporado a la Clasificación Internacional de Enfermedades que publica la OMS.

Actualmente, casi la mitad de los trabajadores europeos manifiesta sufrir estrés en su lugar de trabajo por exceso de responsabilidad, inseguridad laboral, etc., y está comprobado que el estrés prolongado puede causar enfermedades cardiovasculares y musculoesqueléticas graves.

Llegados a este punto, cada vez más sentencias consideran el estrés laboral como accidente de trabajo. La clave está en demostrar la relación de causalidad entre el trabajo y el estrés laboral.

Síntomas, causas y efectos del estrés laboral

El estrés es una reacción natural del organismo, si bien, prolongado en el tiempo, puede causar efectos devastadores en el organismo de una persona.

Existen numerosos síntomas fisiológicos y cognitivos que te pueden ayudar a reconocer si lo que sufres es estrés:

1. SEÑALES TEMPRANAS: dolor de cabeza, alteraciones del descanso, dificultad de concentración, genio alterado, estómago descompuesto, descontento en el trabajo, ánimo decaído.
2. SÍNTOMAS COGNITIVOS: preocupación, inseguridad, miedo o temor, percepción negativa de uno mismo y de las decisiones tomadas, miedo a equivocarse, dificultad para pensar y actuar, ansiedad y depresión.

SÍNDROME DEL BORNOUT

El síndrome de agotamiento profesional o bornout está ocasionado por el estrés crónico en el trabajo y se manifiesta con agotamiento físico y mental intenso, falta de energía e interés y, en consecuencia, bajo rendimiento.

Este estrés crónico puede deberse a diferentes causas que definen su tipología.

TIPOS DE ESTRÉS LABORAL

• Estrés por acoso laboral o mobbing: te sientes víctima de estrategias de incomunicación, intimidación, desprecio, amenazas, incluso violencia.
• Estrés postraumático: se desencadena tras sufrir algún accidente en el trabajo.
• Estrés por sobrecarga o por exceso de responsabilidad: tienes más trabajo del que puedes abarcar, mucha presión por la responsabilidad del cargo, o las tareas superan tus conocimientos.
• Estrés por impotencia: tienes la sensación de no poder influir con tu trabajo en la situación de la empresa o de haber perdido el control.
• Estrés por sensación de inestabilidad: temes perder tu trabajo, en un momento de crisis, por ejemplo, o bien crees que tus condiciones laborales pueden empeorar.
• Estrés por falta de reconocimiento o apoyo: sientes que lo que haces no se reconoce o quizá no recibes las directrices adecuadas ni el apoyo de tus superiores.
• Estrés por aburrimiento o monotonía: te faltan estímulos debido a un trabajo monótono y repetitivo.

CONSECUENCIAS DEL ESTRÉS LABORAL PROLONGADO

Sufrir estrés laboral crónico pasa factura, sin duda, pero no solo hablamos de desgaste emocional y agotamiento físico, también pueden aparecer patologías más severas como la depresión o el insomnio, incluso problemas cardíacos o enfermedades digestivas importantes, por no hablar de consumos de alcohol y otras sustancias.

No podemos olvidar que la persona que funciona bajo la presión del estrés crónico se ve obligada a realizar otras actividades cotidianas para las que quizá ya no esté en las mejores condiciones. Hablamos de conducir, por ejemplo.

Según un estudio realizado por RACE en 2017, el estrés al volante aumenta un 28% el riesgo de sufrir un accidente de tráfico. Las personas estresadas dejan de ver un 20% de las señales de tráfico, realizan maniobras bruscas y acelerones, e incluso su ángulo de visión se reduce a menos de 70 grados.

Por tanto, es indudable que el estrés crónico puede convertirse en la causa de muchos accidentes laborales de tráfico o in itinere, como los sufridos por aquellos trabajadores que cumplen al volante su jornada laboral (repartidores, taxistas, servicios técnicos) o los ocurridos al ir o volver del trabajo.

LAS CIFRAS DEL ESTRÉS LABORAL EN ESPAÑA

Hace algunos años, la OMS estimaba que en 2020 la ansiedad y la depresión causadas directamente por el estrés laboral serían la primera causa de baja laboral en el mundo.

La realidad es que, hoy por hoy, el estrés causa más del 30% de las bajas laborales en nuestro país y se ha convertido en un problema de primera magnitud con altos costes personales y laborales.

Falta de apoyo, relaciones deficientes, dificultades financieras y de conciliación están detrás del estrés, y está comprobado que los trabajadores estresados son un 60% menos productivos. No en vano, cada vez más iniciativas dentro de las propias empresas buscan promocionar la salud y el bienestar dentro del centro de trabajo, aunque solo un 25% de ellas han implantado medidas en este sentido.

Baja por estrés laboral: cómo solicitarla y con qué prestaciones

Si la situación se cronifica y se hace necesario solicitar una baja, es importante demostrar que el estrés se ha producido por circunstancias inherentes o relacionadas con el puesto de trabajo. Es decir, que se trata de una baja por contingencias profesionales.

• CONTINGENCIAS COMUNES: en este caso, el estrés no está relacionado con la actividad laboral y se tratará como cualquier otra enfermedad común. Esta baja por contingencias comunes empieza a cobrarse a partir del cuarto día.
• CONTINGENCIAS PROFESIONALES: cuando la depresión o la ansiedad han sido provocadas por el estrés que el paciente vive a diario en su actividad laboral, será la mutua de trabajo la que gestionará la incapacidad de trabajar del empleado. Esta prestación empieza a cobrarse al día siguiente de ser reconocida esta baja.

Duración de la baja: este tipo de baja por depresión o ansiedad motivada por el estrés laboral se reconoce por un máximo de 12 meses, si bien puede alargarse 6 meses más si el médico de la mutua lo considera necesario. Transcurrido este plazo extra, si la persona sigue incapacitada, su caso deberá ser estudiado por un tribunal médico por si es conveniente concederle una incapacidad permanente.

Prestación: en la baja por contingencias profesionales, se cobra el 75% de la base reguladora desde el día siguiente a la baja.

Jurisprudencia: ¿qué dice el Tribunal Supremo del estrés laboral como accidente de trabajo?

Según el art. 156.1 de la Ley General de la Seguridad Social, se considera accidente de trabajo «toda lesión corporal que el trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por cuenta ajena».

En este sentido, cada vez más sentencias consideran el estrés como accidente laboral. Algunos ejemplos:

• Sentencia dictada por la sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que reconoce como accidente laboral el ictus sufrido por un trabajador sometido a un alto grado de estrés.
• Sentencia dictada por el Juzgado de lo Social de Bilbao que considera accidente laboral el estrés postraumático que sufrió una trabajadora de una sucursal bancaria tras sufrir un atraco en la misma.
• QUÉ DICE EL TRIBUNAL SUPREMO: el Alto Tribunal ha establecido que se consideran accidente laboral no solo los accidentes en sentido estricto o las lesiones que se produzcan a consecuencia de estos, sino también las enfermedades que puedan originarse en el trabajo. Es más, argumenta que cuando se pretenda eliminar la presunción de laboralidad en la calificación de la enfermedad, tendrá que quedar acreditado de manera suficiente.

¿Cómo demostrar que el estrés es el causante de un accidente laboral?

El infarto de miocardio debido al estrés es uno de los accidentes laborales más comunes, sin embargo, es complicado establecer el vínculo entre la lesión y el estrés laboral.

Es en la propia ley (art. 156 de la Ley de Seguridad Social) y en la jurisprudencia donde encontramos los argumentos para defender este vínculo; sin embargo, será un perito psicólogo el que deba realizar un estudio para determinar los motivos de tu estado.

Para que el estrés sea calificado como accidente de trabajo debe estar generado por uno o varios estresores objetivos (son percibidos por sujetos externos a la organización) y deben considerarse como necesarios y suficientes para generar el cuadro de estrés laboral.

¿PUEDO DEMANDAR A LA EMPRESA POR ESTRÉS LABORAL Y CONSEGUIR UNA INDEMNIZACIÓN?

Llegado el caso, habrá que demostrar que ese estrés que ha trastocado nuestra vida totalmente ha sido provocado por algunos factores internos o externos relacionados con la actividad laboral, incluso que en algunos casos es responsabilidad directa del empleador, o este no ha puesto de su parte por evitarlos.

CONSEJO ONANDIA: cabe decir que todas las empresas tienen una responsabilidad exigible por parte del trabajador, relativa a la prevención de posibles riesgos laborales a los que están expuestos sus empleados. Se puede conseguir una indemnización justa con una demanda bien argumentada.

El Estatuto de los Trabajadores es bastante claro cuando especifica que «el empresario que organice el trabajo […] deberá tener en cuenta el principio general de adaptación del trabajo a la persona, especialmente de cara a atenuar el trabajo monótono y repetitivo en función del tipo de actividad y de las exigencias en materia de seguridad y salud de los trabajadores».

Así, una posible demanda deberá probar la causa del estrés laboral que sufre esta persona, y esa será la mayor dificultad al emprender acciones legales, fundamentar esta causa. No es lo mismo hablar de un caso de bore out (estrés por aburrimiento y falta de actividad adecuada) que de un cuadro de estrés laboral generado por mobbing (en el que el empleador puede haber degradado a su empleado con tareas muy por debajo de la categoría para la que fue contratado).

EN CASO DE FALLECIMIENTO POR ESTRÉS LABORAL, ¿TIENE LA FAMILIA DERECHO A INDEMNIZACIÓN?

Si finalmente se produce el fallecimiento de la persona que ha sufrido, por ejemplo, un infarto a causa del estrés laboral, la familia tendrá que asumir las consecuencias no sólo personales sino económicas, ya que en algún caso puede quedarse sin su principal fuente de ingresos.

Si se consigue el reconocimiento como accidente laboral, es posible conseguir las indemnizaciones oportunas.

CONSEJO ONANDIA: en un caso de accidente de trabajo por estrés laboral, será imprescindible contar con el asesoramiento de un abogado especializado en accidentes. Es vital reunir las pruebas necesarias, emprender las acciones legales y solicitar las indemnizaciones que puedan corresponder a los perjudicados.